jueves, 10 de septiembre de 2009

De wikiasesinos y epitafios

En: La Nueva Provincia, Jueves 10 de septiembre de 2009.

Comentario:
Yo había leído el 8 de septiembre, en Infobae, un libelo realmente vergonzoso, por lo intencionalmente sesgado y animoso, aplicando en él toda la seudología de la moderna usanza, al estilo de: "dijo que le gusta cómo juega al fútbol Ronaldo, luego, le gustan los travestis". Tan así era el artículo (diría Arjona, de una calidad más cercana a las últimas cuatro letras de esa palabra), que ni siquiera hubo quien se animara a firmarlo.

Pero como en la Argentina la estupidez se mueve más rápido que la luz, y lo anecdótico ocupa el lugar de lo sustancial con demasiada facilidad (obsérvese que, como lamentaba Indalecio Prieto, esa misma ceguera fue el proemio a la tragedia de la guerra civil española), parece que la respuesta sancionatoria, muy
à la carte, no podía hacerse esperar. A esa respuesta, y al ataque necio que la motivara, apunta Luis María Bandieri en el excelente artículo que pego a continuación.



ENFOQUE

José Antonio, fusilamiento mediático


Se pide la remoción, como camarista, de mi viejo amigo Eduardo Vocos Conesa, porque, en un aviso fúnebre dedicado a Mohamed Alí Seineldín, citó algunas frases de discursos de José Antonio Primo de Rivera: "El laconismo militar de nuestro estilo" y "Dios le dé el descanso eterno y a nosotros nos lo niegue", etc.

Resulta opinable, desde todo punto de vista, incluido el estético, cuál debe ser el estilo de una esquela mortuoria. No es el tema de esta entrega, y dejo este asunto al juicio lapidario del lector. Me interesa otra cosa: ¿Es necesariamente antidemocrático citar a José Antonio? He visto y oído la retahíla periodística armada a los apurones sobre un vistazo a Wikipedia: ese José Antonio, un antidemocrático dictador español (a estas alturas de Internet, todavía lo confunden con su padre, don Miguel, dictador apañado por el rey Alfonso XIII, abuelo del monarca actual, desde 1923 a 1930); ese José Antonio, que estaba contra el voto de la mujer; ese José Antonio, admirador de Hitler y Mussolini; ese José Antonio, fundador de Falange Española, que sumió a España en la noche de la guerra civil, etc.

No voy a confeccionar aquí una contrabiografía (hace unos años, Vicente Massot escribió muy acertadamente sobre su pensamiento) porque el avisado lector tiene, justamente, a mano Wikipedia, debiendo tomarse, eso sí, algún tiempito para metabolizarla y separar sus distintas y a veces contradictorias capas de información.

En cambio, voy a transmitir algunos juicios de españoles, no falangistas ni fascistas ni nada de eso, sobre José Antonio, que me parecen muy ilustrativos.

Comienzo con Rosa Chacel (1898-1994), gran novelista (pongo por caso La Sinrazón ) exiliada en Brasil durante la guerra civil y el franquismo. Visitaba frecuentemente Buenos Aires, donde Guillermo de Torre, el cuñado de Borges, la introdujo en el grupo "Sur" y un día... Dejemos que lo cuente:

"Ayer, al pasar por los puestos de libros del Cabildo, vi unos cuantos libros españoles, de la España actual. ¡Lagarto, lagarto!... Sin embargo, me compré nada menos que las Obras Completas de José Antonio. Hacía mucho tiempo que quería leerlas y... Llegué a casa y me leí de un golpe trescientas páginas. Es increíble. Dos cosas son increíbles; una, que todo eso haya podido pasarme inadvertido a mí, en España, y otra, que España y el mundo hayan logrado ocultarlo tan bien. Porque no me extraña que llegaran a matarle: estaba hecho para eso, para que después de muerto se haya hecho el silencio sobre su caso. Era difícil y expuesto por la gran confusión en torno... Fenómeno español por los cuatro costados [.]. Despertad, sacudid a uno de esos ciegos y será capaz de mayor abnegación, pero mientras viva ofuscado por su propio brillo, activado por su propia hambre, no esperéis que dialogue con el prójimo, conformaos con poder evitar que lo devore. Hay que estudiar esto en Unamuno, en Ortega, en José Antonio, su reflejo o espectro. En lo que quedó de ellos, en quienes les fueron afectos y en quienes les execraron sin comprenderlos o, lo que es peor, comprendiéndolos y temiendo (por pereza, por miedo o por inepcia) lo que ellos exigían".

Y ahora recordaré a un político visceral de la II República, Indalecio Prieto (1883-1962), socialista muy personal, por cierto. Ya en el exilio, tuvo ocasión de hacer un mea culpa por haberse contado entre los organizadores de la "Revolución de Octubre" de 1934 en Asturias, y también en Madrid y Barcelona, contra el gobierno donde participaban ministros de la coalición de derechas que había triunfado en las elecciones legislativas de noviembre de 1933. El 5 de octubre de 1934 puede considerarse el punto de partida de la guerra civil que habría de durar hasta 1939. Y Prieto, que reconocía a José Antonio, como este a él, decía:

"Cuantos me reprochaban las defensas de ese joven impetuoso y bienintencionado conocen mi respuesta. Es que también le debía la vida, porque él y su gente me custodiaron hasta mi domicilio, una noche en que algunos, que se decían correligionarios míos, habían acordado "abolirme". Ya conoce V.E., por escrito, el episodio. Son páginas personales que dicen muchas cosas. Data de muchísimo tiempo la afirmación de que en todas las ideas hay algo de verdad. Me viene esto a la memoria a cuenta de los manuscritos que José Antonio Primo de Rivera dejó en la cárcel de Alicante. Acaso en España no hemos confrontado con serenidad las respectivas ideologías para descubrir las coincidencias, que quizá fueran fundamentales, y medir las divergencias, probablemente secundarias, a fin de apreciar si estas valían la pena de ventilar en el campo de batalla. La confrontación de ideologías, que no se hizo entonces, debe hacerse ahora. Porque es necesario un esfuerzo generoso en busca de puntos de concordia que hagan posible la convivencia, tratándonos como hermanos y no peleando como hienas".

Traeré en este punto el testimonio de Jordi Pujol, nacionalista catalán nacido en 1930 y que fuera presidente de la Generalitat Catalana:

"Mire, sé que la cita es un riesgo, pero uno de los que entendieron mejor, y en circunstancias muy difíciles, el catalanismo, fue José Antonio Primo de Rivera".

Aporto ahora un notable anarquista que mucho anduvo en nuestra tierra, Diego Abad de Santillán (1897-1983), autor de la Gran Enciclopedia Argentina . Abad de Santillán, militante e historiador del anarcosindicalismo, conocía muy bien cómo operaban los comisarios políticos stalinistas y sus instrumentos, las "checas" parapoliciales, durante la guerra civil española, y cuántos de sus camaradas habían sido torturados y sacrificados por ellos. Escribió, a propósito, un formidable alegato en Por qué perdimos la guerra . Hubo contactos, entre 1935 y 1936, entre dirigentes del anarquismo y la Falange. Cuenta Abad de Santillán (que, para quien dude, también está en Wikipedia):

"A pesar de la diferencia que nos separaba, veíamos algo de ese parentesco espiritual con José Antonio Primo de Rivera, hombre combativo, patriota, en busca de soluciones para el porvenir del país. Hizo, antes de julio de 1936, diversas tentativas para entrevistarse con nosotros. Mientras toda la Policía de la República no había descubierto cuál era nuestra función en la FAI, lo supo Primo de Rivera (...) españoles de esa talla, patriotas como él, no son peligrosos ni siquiera en las filas enemigas. Pertenecen a los que reivindican a España y sostienen lo español, aun desde los campos opuestos, elegidos equivocadamente como los más adecuados a sus aspiraciones generosas. ¡Cuánto hubiera cambiado el destino de España si un acuerdo entre nosotros hubiese sido tácitamente posible, según los deseos de Primo de Rivera!".

Buenaventura Durruti, el mítico jefe de columna epónima, muerto el 19 de noviembre de 1936 de una bala comunista o trotskista (esto es, un día antes de la ejecución de José Antonio, en Alicante), dejó asentada esta profecía:

"Con la muerte de José Antonio, si llega a consumarse, morirá también toda esperanza de conciliar a los españoles antes de muchas décadas".

Podría seguir, e incluso referirme a la amistad entre José Antonio y Federico García Lorca, casi desconocida. Dejo aquí.

José Antonio, como tantos otros sacrificados en aquellos años terribles del siglo pasado, debe ser defendido tanto de sus antiguos panegiristas como de los que le pegan puñaladas a un muerto. Incluso, hoy, de la videoignorancia nacional.

Sí, un día de octubre de 1933 se entrevistó con Benito Mussolini, a quien admiró. No voy a señalar quiénes lo elogiaban por entonces, como Winston Churchill y el Mahatma Gandhi, aunque por muy distintas razones.

Don Amadeo Sabatini, en 1935, dio su anillo de oro de casado, como muchos de un lado y del otro del charco atlántico, cuando Italia fue sancionada por Inglaterra y Francia, potencias coloniales, a causa de la invasión de Etiopía.

Y, en 1938, un político argentino llamado Lisandro de la Torre, en una conferencia titulada "Grandeza y Decadencia del Fascismo", afirmó:

"El fascismo, teoría reaccionaria en el orden político, es, en materia social, por los hechos que ejecuta y por la doctrina misma, una teoría no sólo progresiva sino revolucionaria, y en los fascismos de imitación no lo tienen en cuenta, salvo, en todo caso, algunos, y con propósitos no muy precisos, que difundía el infortunado José Antonio Primo de Rivera para el uso de su Falange Española".

Ese año 1938, Juan Domingo Perón enviudó de Aurelia Tizón y, al año siguiente, estaría en Italia. Ya se sabe el resto.

En fin, lo importante de esta referencia histórica a José Antonio es que un hombre en la cárcel, a quien se juzgó por el supuesto delito de haber preparado desde su celda un alzamiento, sobre cuya cabeza planeaba ya la muerte, incluso por amenaza de irrupción de turba y "paseo", quiso, hasta su último día, hallar una fórmula de concordia para su patria.

Ese es su último y más alto ejemplo. Paz, entonces, a lo que, en sus palabras respecto de su padre, resulta una "justa memoria".

¿Y la democracia? Todo es más complicado de lo que parece. La democracia, decía Pierre Rosanvallon, no es una solución, sino un problema. El problema que manifiesta actualmente es que se le ha perdido el pueblo y no se sabe dónde está.

Conocemos una clase política fragmentada, autorreferente y casi incestuosa, por un lado, y una masa de compatriotas reducidos a servidumbre de clientela eleccionaria por exclusión, del otro.
Ahí, en el autoaislamiento de quienes dicen dirigir y huyen hacia adelante, y en el silencio que explota en violencia de los marginados, es donde hay que pensar y actuar, y no en el hurgoneo de las despedidas mortuorias.

43 comentarios:

goolian dijo...

Como anarquista no puedo más que repudiar la figura de Mohammed Alí Seineldín, flagrante cometedor del delito de sedición.
Si bien no soy ducho en política española del siglo XX, la fundación de harramientas fascistas por parte de Primo de Rivera, también lo hacen merecedor de mi desprecio.
Como toda manifestación de fascismo, desde Franco hasta Stalin.
O más modernamente, como desde la Texaco hasta Corea del Norte.

goolian dijo...

Por lo poco que pude averiguar, José Antonio Primo de Rivera está mucho más cerca de la Liga Patriótica de Carlés que de el pacifismo tolstoiano.

Su constante elección de la violencia como método, es otra buena razón para despreciarlo, no ya como anarquista, sino como pacifista.

Más Lanza del Vasto y menos Primo de Rivera por favor.

Claude dijo...

Seguramente ese Rivera hubiera sido mejor visto por Fernández si se hubiera limitado a sacarse fotos con Franco y se hubiera dedicado a rematar casas.

Occam dijo...

Goolian: Como anarquista que usted se dice, debiera conocer las evidentes simpatías y lo cerca que estuvieron de fusionarse Falange Española y la Federación Anarquista Ibérica (FAI), al punto que los comunistas -que luego purgaron a todos los anarquistas que fueron encontrando, y es una historia demasiado conocida como para recordarla aquí- ironizaban esa simpatía entre el nacionalsindicalismo y el anarcosindicalismo llamando a la organización del segundo "FAIlange".
La clave de ese emparentamiento está en Sorel. Sin Sorel no se pueden entender los conceptos sustancialmente progresistas y revolucionarios del nacionalismo que ancló en la época de Entreguerras en las reividicaciones obreras y sociales de la mano del sindicalismo.

Es importante hacer notar que José Antonio fue fusilado por la República por delito de opinión, atribuyéndole una suerte de autoría intelectual del alzamiento de julio del 36, cuando él estaba hace tiempo en prisión. Es decir, una autoría por ejercicio de la telepatía. Y que poco o nada tenía FE de las JONS en común con el franquismo y en general, con el conservadurismo católico que se hizo con el poder en España en 1939. El decidido rechazo de Ledesma Ramos a la entelequia impuesta por Franco de la "Falange Española Tradicionalista" (FET), como forma de echar agua y controlar a una fuerza evidentemente revolucionaria, habla por sí mismo.
Pero en fin, José Antonio no participó de la Guerra Civil Española. Mucho antes de que ella comenzara, en la etapa de la violencia sorda, impuesta desde 1934 por el golpe de timón hacia el marxismo de la República, y las "checas" parapoliciales que asolaban las ciudades, fundamentalmente Madrid y Barcelona, estaba detenido en prisión, y de inmediato de iniciada la guerra fue fusilado, el 20 de noviembre de 1936.
Así que no sé qué decir de su pacifismo, aunque alguien -creo yo- con más cartel al respecto, como lo fue Gandhi, opinaba muy diferente de usted respecto de José Antonio, que por lo demás, sí se destacó como intelectual y literato de fuste.

Mis cordiales saludos.

aquiles m. dijo...

Mi estimado Occam:
Si hoy en la Argentina Hebe Pastor de Bonafini (una delincuente subsidiada) dirige una universidad, está todo dicho.
Abrazos

Incorrecto dijo...

Occam: la nota es fantástica. El repudio a la figura histórica de José Antonio es propia de la tilinguería democrática.

Hola goolian: no me caiga en análisis superficiales marxistas, Ud es inteligente. Gusto de encontrarlo nuevamente.

Le dejo un link para ahondar en el tema. No dejen de visitar el sitio en general, es maravilloso.

http://www.laeditorialvirtual.com.ar/Pages/JoseAntonio/JoseAntonio.htm

Incorrecto dijo...

http://www.laeditorialvirtual.com.ar/Pages/JoseAntonio/JoseAntonio.htm

Incorrecto dijo...

Goolian: no te entiendo. Sos anarquista y calificás a Seineldín de "sedicioso", contra quien, contra el ESTADO? Te juro no entiendo, explicame.
Saludos

Forbidden Reloaded dijo...

Goolian: Bakunin creo, no era una paloma de la paz. Seineldín es el típico caso de alguien que desperdició una vida casi heroica, cuyo punto de inflexión fue a partir del 14 de junio de 1982, primero cayendo en mesianismos golpistas, antisemitas, fundamentalismos religiosos y por ultimo llegando a apoyar al kirchnerismo.

Claude: muy acertada su ironía.

Occam: un justo homenaje a José Antonio y una muestra mas de que con la acusación que se hace a este juez estamos cada vez mas cerca del delito de opinión. Esperemos no terminar como Primo de Rivera.

"Formare junto a mis compañeros
Que hacen guardia sobre los luceros....."

goolian dijo...

Iré de atrás para adelante.
Forbidden, no me enrolaría en la corriente de Bakunin, sino en la de Eliseo Reclus, Tolstoi o Lanza del Vasto; no necesariamente anarquistas pero sí pacifistas.
Por otro lado justificar la violencia de Primo de Rivera con la de un "contrario" ideológico como Bakunin, como argumento es más que endeble.
Y si quiere me explayo sobre la guerra de Malvinas y el "héroe" Seineldín, pero me temo que mi visión no le gustará.

goolian dijo...

Incorrecto 11:00.
Entienda m´'hijo.
Ser anarquista no implica no respetar la ley. Eso es cosa de capitalistas corruptos.
Ser anarquista privilegiar la libertad individual en contra de los desmanes del estado, del capitalismo, del comunismo y de todo sistema de explotación.
Y también es ser pacifista y despreciar a los que ejercen el poder por la fuerza de los fusiles.
Seineldín no es un héroe, es un DELINCUENTE culpable de un delito serio como es sedición, eso lo ve hasta un anarquista, je.

goolian dijo...

Incorrecto, leí el texto que tan gentilmente me mandó a leer.
"un hombre nefasto, que se llamaba Juan Jacobo Rousseau," es una desafortunadísima aseveración sobre un importante filósofo.
Su permamente defensa de entelequias como la patria y la espiritualidad no hacen más que ocultar conservadurismo reaccionario.
Por otro lado su valoración de la Iglesia Católica como sostén espiritual de España, es aliarse con una de las instituciones más siniestras y opresivas de la historia.
Lo que sí le reconozco que me sorprendió fue su aparente defensa del campesinado pobre de su país; pero su "santificación" por una dictadura nefasta como la de Franco, invalidan a mi juicio toda posible lucha contra la desigualdad.

goolian dijo...

Incorrecto, claro, "usted es inteligente".
Los fascistas son genios y los marxistas idiotas. Lo verdaderamente estúpido es ser TAN dicotómico.


Caigo en los análisis que quiero y demás usted ni siquiera tiene un blog, es sólo un anónimo.

goolian dijo...

Occam, la opinión de Gandhi sobre JA Primo de Rivera, es un argumento de alusión a la autoridad, claramente falaz. "Si Gandhi admiraba a Rivera, éste era bueno".
Me resulta sumamente llamativo que un defensor a ultranza de la religión católica y el orden establecido sea afín, según usted afirma a un movimiento cuyo casulamente es "Ni dios ni patrón".
Es raro, no ?
Llamar progresista y revolucionario al nacionalismo no será un contrasentido ? El nacionalismo no es revolucionario es extremadamente conservador y a juzgar por la dictadura posterior que endiosó a Rivera, la franquista, mucha revolución y equidad social no hubo.

Por último, si de literatura hablamos usted me habla de Rivera y yo de Tolstoi. Estamos viendo canales distintos me parece.

Destouches dijo...

En fin, siempre hay mucha mala fe cuando se trata de juzgar históricamente a figuras como José Antonio Primo de Rivera. El pecado ideológico es el más severo de todos, no descubro nada con eso. Buena prueba de ello es el escándalo que se armó por un simple aviso fúnebre.

No hay dudas de que se trató de un hombre culto, con un alto sentido del honor y que, quizá tardíamente, se dio cuenta de que la guerra fratricida era inevitable. Pero fue uno de los pocos que quiso evitarla, en un pais que ardía en deseos de amasijarse. Recomiendo el libro "En busca de José Antonio" de Ian Gibson, un inglés socialista que no comulga precisamente con el ideario de José Antonio.

goolian dijo...

Gracias por el dato Destouches.
Un libro histórico serio es una bibliografía más coherente que páginas de internet, incluida la Wikipedia.
Se consigue en Argentina ?

Occam dijo...

ANARQUISMO Y FALANGE

"Han sido muchos los contactos entre falangismo y anarquismo. Quizá el más famoso caso sea el de Marciano Pedro Durruti, hermano de Buenaventura.

"Quince años más joven que Buenaventura, Marciano Pedro, ingresó en la Falange a comienzos de 1936 despuès de pasar por el Ateneo Libertario. Trató de mediar entre José Antonio Primo de Rivera y el propio Buenaventura y acabó fusilado en 1937. El poeta Victoriano Crémer dedica un cálido espacio a Marciano Pedro Durruti -él lo define como «anarco-falangista»- en su memorial El libro de San Marcos.

"Otro detalle de los intentos de contacto entre Falange y los anarquistas lo describe el líder de la Federación Anarquista Ibérica, Diego Abad de Santillán que escribe , refiriéndose a los años 1931-1936, precedentes a la guerra : “En diversas ocasiones se acercaron a nosotros gentes de la Falange para que tuviésemos un encuentro con Jose Antonio Primo de Rivera y se nos hizo llegar cartas y manifiestos en los que había muchos objetivos comunes. No quise acceder… Lo único que puedo decir es que estoy arrepentido de no haber querido aceptar el encuentro , pero eso es la historia que pudo ser y no fué… ”
(Carta a Carlos Rojas, 1 de Diciembre de 1970)".

Fuente: Minuto Digital
Link: http://www.minutodigital.com/actualidad2/2008/08/18/melchor-rodriguez-garciael-angel-rojo-ya-tiene-calle-en-sevilla/

Mensajero dijo...

No es extraño encontrar afinidades en los opuestos.
Algunas izquierdas y algunas derechas (si se me permite utilizar categorías tan vintage) tienen discursos similares de resistencia a la globalización, por poner un ejemplo actual.
Desconozco el contenido de la cita que le trajo problemas al amigo de su colega, pero me inclino por la tolerancia, es decir, tal vez valga una crítica, pero en principio no me gusta que alguien pueda ser desplazado de un cargo por su ideología.
Se podría replicar que alguien que ocupa un cargo tan importante en el Poder Judicial de una República parlamentaria está impedido de hacer apología de un modelo totalitario como el que proponía la Falange, pero desconozco los detalles, y el campo del Derecho y sus interpretaciones no es lo mío.
Como sea, saludos en su retorno.

Occam dijo...

Mensajero:
Nadie hizo apología de nada, tan sólo una cita, y bien afortunada por cierto. Lo que ocurre es que es incómodo el homenajeado (juicios personales de cada uno de nosotros aparte) y es incómodo el citado (juicios personales de cada uno de nosotros aparte) para cierta mentalidad pedorra, simplista, sesgada y con una tendencia irrefrenable hacia el stalinismo cultural.
Lo que sí podemos colegir es que, para que no se nos tache de antidemocráticos (en el sentido moderno de esa palabra, claro está, que es lo único que totalitariamente importa), debemos abstenernos de citar, por ejemplo a: Aristóteles, Maquiavelo, Hobbes, Julio César, Napoleón, San Martín, Sarmiento, Marx, Ernesto Guevara, Mishima, Maurras, Hegel, etc., etc., y casi todo el mundo que a usted se le ocurra.
Si eso no es arbitrario, intolerante y, obviamente, antidemocrático...

Mis cordiales saludos.

Destouches dijo...

Goolian:

Yo lo compré en Madrid, pero lo editó una de las editoriales grandes (creo que Planeta). No debe ser difícil de conseguir.

Occam: le quedaron varios por nombrar (Heidegger, Céline, Nietzsche, el propio Borges -"porque era de derecha"-, Lugones, Mao, Rosas, Ortega y Gasset, Carlos V, etc.). En realidad, son bastante pocos -y más bien mediocres- aquéllos a quienes no se les puede enrostrar alguna mácula antidemocrática. Habrá que atenerse invariablemente a lo políticamente correcto.

Destouches dijo...

Y a quién le interese leer probablemente lo mejor que se haya escrito sobre el comienzo de la Guerra Civil Española, le recomiendo "San Camilo, 1936" de Camilo José Cela. Un libro casi inconseguible; la censura de la corrección política es sutil pero implacable.

Occam dijo...

Destouches: Gracias por sus aportes bibliográficos. Como decía la remera de Rodrigo Fresán (ése se puede citar, ¿no?): "So many books, so little time"...

goolian dijo...

En lo referente al arte y a la literatura hay que saber diferenciar entre la vida y la obra.
Tenemos el caso de Michelangelo Merisi ditto il Caravaggio que era un reverendo hijo de puta asesino pero como pintor era un genio absoluto. O Louis Ferdinand Auguste Destouches, que no es el forista, más conocido como Celine, que si bien no fue un asesino, su antisemitismo rabioso es moralmente reprobable. Pero su obra literaria es excelente.
Cuando nos alejamos del arte, la cosa me parece se complica, Martin Heidegger, sin duda el filósofo más complejo del siglo XX, fue un nazi convencido afín a las SA. Aparentemente su renuncia a la Universidad de Friburgo tuvo que ver con la purga insana que Hitler realizó para entronar a las SS.
Pero Heidegger nunca renegó de su pasado nazi.
El problema es que podemos separar la obra artística del hombre, pero podemos separar una obra de pensamiento de una postura política condenable ?
Creo que sí pero agrega una dificultad extra al ya difícil filósofo.
Cuando llegamos a un caso como Primo de Rivera, si bien no es un genial escritor o pensador, no se le puede negar cultura o inteligencia, máxime teniendo en cuenta sus adláteres de ideología.
Pero justifica su refinamiento en la "obra" su postura política ? Yo creo que en este caso el saldo es defavorable.
Entonces, la argumentación tendiente a salvar a PdR porque era culto, escribía bien y era un GRAN pensador, comparado con Franco sobretodo, no invalida su ideario fascista, militarista y religioso.

goolian dijo...

Agradezco sobremanera las referncias bibliográficas brindadas y trataré de conseguiras.

goolian dijo...

Occam, no se trata de ser autoritario.
Usted tiene todo el derecho del mundo de hablar bien, o mal, de quien quiera.
Himmler por ejemplo era muy inteligente y varios jerarcas nazis eran conocedores de arte al punto que solían amasar colecciones robadas.
Pero suponiendo que Primo de Rivera haya sido un demócrata que luchaba por la igualdad de clases, mal entendido por la dictadura sangrienta que lo entronizó, sigue siendo un emblema de un movimiento político e ideológico que a mi juicio merece el mayor de los escarnios. Me recuerda a algunos peronistas que dicen que Evita era la que amaba a los pobres y Perón un demagogo que la usó y que distinto hubiera sido el peronismo si Evita hubiera llegado a vieja. Pero tanto en el caso de la "líder espiritual" como en el del falangista, son ucronías indemostrables.
Como lo merece el fascismo de signo contrario, el comunismo staliniano, para que no me tilden de progretón zurdoide.
Como de cualquier manera tengo severas dudas sobre las intenciones reales de PdR con respecto a los desclasados, sigo pensando que se debe trazar la línea dejando afuera toda manifestación de fascismo nacionalista.
Porque es una línea de pensamiento que MUY rápidamente lleva a adherir a monstruosidades como la absurda guerra de Malvinas, la tortura y desaparición de personas durante el Proceso, o manifestaciones de nacionalismos extremos que sólo exacerban la xenofobia y el racismo imperantes.

Occam, usted tiene todo el derecho del mundo a ser fascista, y yo voy a defender ese derecho.
Pero también tengo derecho, como anarquista a decir que todo fascismo me repugna.

Destouches dijo...

Goolian:

Sin ánimo de defender a nadie, ni de interpretar sus ideas políticas (porque no las conozco), observe que Occam nunca dijo ser fascista, a diferencia suya que sí se autodefinió como anarquista. Por lo tanto, quizá el calificativo aplicado a Occam sea un tanto gratuito (y le diría que gratuitamente agresivo, ya que un segundo después, declara que todo fascismo le repugna).

Occam tan sólo intentó destacar que existieron afinidades entre el anarquismo y el falangismo (que sólo por comodidad del lenguaje y pereza analítica se identifica con el fascismo) antes y durante la Guerra Civil Española. Es un dato de la historia, inmodificable. Claro, quizá se trataba de anarquistas que no eran tan anarquistas como usted, o simplemente se dieron cuenta de que les iba a resultar mucho más difícil sobrevivir (en el sentido biológico del término) si se imponían los comunistas.

goolian dijo...

Destouches, es verdad que el anarquismo fue fagocitado por el comunismo a nivel internacional.
Y yo simpatizo con corrientes más raras y antiguas, como Reclus o hasta Tolstoi.
Me sigue pareciendo muy extraña la confluencia entre anarquismo y falangismo de Rivera,(diferenciémoslo del de Franco). Pero como confesé mi relativa ignorancia del tema prometo leer a Gibson y si puedo a más autores.

Con respecto a Occam, no puedo ocultar mi decepción si éste se declarara fascista, cosa que es cierto no hizo todavía. Pero haré TODO mi esfuerzo para acrecentar el diálogo con él en aras del mutuo entendimiento.

No quise ser agresivo ad hominem, sino en forma general hacia el fascismo como forma de pensamiento, por su autoritarismo y violencia.

Que no son privativos de él, por supuesto.

Pero insisto se debe trazar la línea dejando afuera toda manifestación de fascismo nacionalista.
Porque es una línea de pensamiento que MUY rápidamente lleva a adherir a monstruosidades como la absurda guerra de Malvinas, la tortura y desaparición de personas durante el Proceso, o manifestaciones de nacionalismos extremos que sólo exacerban la xenofobia y el racismo imperantes.

LA elección de Primo de Rivera por sobre otras cosas también puede ser leída como una postura política.

Occam dijo...

Goolian: ¿Estuvo viendo a la "vieja" José Pablo Feinman en el Canal Encuentro? Le recomiendo el libro "Heidegger" de Ernst Nolte.
Igualmente, como decía Nietzsche, que en realidad parafraseaba a los griegos, en un mundo sin sentido, lo único realmente valioso es aquello que uno hace por embellecerlo, es decir, el arte. Así que en aquellas personas que han elegido alguna de las altas formas de manifestarse, ¿para qué quedarse con las vulgaridades del anecdotario bibliográfico? ¿Por qué ver Intrusos pudiendo ir al Colón?
Saludos.

Occam dijo...

Goolian:
El comentario que escribí recién era sobre lo que usted dijo sobre Heidegger. Pero ahora que seguí leyendo, me encontré con otras muchas apreciaciones de usted que me llevan a tener que redactar el presente.
Recién ahora me he dado cuenta, porque soy un poco zonzo y otro poco ingenuo, que su sistema de "opinar" conduce a monopolizar el tenor, dirección y sentido de cualquier discusión y de los comentarios en este sitio, cosa que confronta drásticamente con la vocación libre y plural que intento darle a este blog.
Como la idea es darle espacio a la opinión de todos, y poder plantear diálogos de lo más variados y entretenidos, en lugar de ser conminados a defendernos y/o a explicar cada palabra que empleamos, cada cita que hacemos, cada cosa que opinamos, es que me parece preferible no entrar una vez más en cualquier tipo de provocación, y dejar de lado la natural tentación didáctica conducente a explicarle a usted las diferencias entre la guerra civil española, la segunda guerra mundial, Waterloo y la batalla de Malvinas; o por qué Franco era tan falangista como Firmenich stalinista o Muniz Barreto peronista, y tan sólo intentar satisfacerlo a usted para conseguir una paz duradera y consistente (como lo haría cualquier buen pacifista).
Así las cosas, a usted y sólo a usted, le confesaré que soy fascista, y también tataranieto de Bela Kun por rama materna y sobrino nieto de Pol Pot por rama paterna.
Espero que así las cosas, usted definitivamente satisfecho, me hará el favor de dirigirse a otros blogs más afines y monocordes para concordar democráticamente, pacifistamente, antimilitaristamente y etcéteramente.

Mis cordiales y definitivos saludos.

Occam dijo...

Claude, Forbidden Reloaded, Incorrecto, Destouches, Aquiles M.: Muchas gracias por acordarse de este blog tan abandónico, y permanecer fieles a los tiempos y ganas de uno, que a veces también me abandonan.
Un abrazo a todos y otra vez sean ustedes bienvenidos.

goolian dijo...

"Así que en aquellas personas que han elegido alguna de las altas formas de manifestarse, ¿para qué quedarse con las vulgaridades del anecdotario bibliográfico? ¿Por qué ver Intrusos pudiendo ir al Colón?"
Qué gracioso !!
http://www.operayre.com.ar/fundamus/operas/fairy/fayri.htm
La persona entre la violinista rubia y la violagambista morocha de anteojos en primera fila de la orquesta soy yo.
Espero algún día volver a tocar ahí.

goolian dijo...

Occam, creo haber mantenido siempre el respeto y abierta la posibilidad de diálogo.
Si usted me está echando de su blog o me rechazará sistemáticamente me dará la razón.
Sepa que lo leo con mucha atención y hasta lo extrañaba.
Como después de un "período de abstinencia" bastante notorio, apareció un post sobre una figura emblemática del fascismo, me resultó sumamente chocante.
Como supongo le habrá parecido a usted mi reacción.
Pero quiero que sepa que en un plano serio SIEMPRE podrá hablar conmigo.
Y tal vez no se trate de una guerra virtual o ataques cibernéticos, sino de voces no siempre concordantes.
Comentaristas panegíricos de blogs hay miles, me parece que lo interesante es la confrontación de ideas de la que con diálogo se puede aprender.
Yo modifiqué mi visión de Primo de Rivera a partir de esta discusión y me prometo ahondar sobre el tema con los datos que brindó Destouches. Espero que usted entienda el rechazo visceral que puedo tener hacia todo régimen totalitario como el fascismo.


Si bien su filiación con el Khmer Rouge me da un poco de miedito; estoy más que dispuesto a que me enseñe las diferencias entre Franco y Rivera, o entre Lenin y Trosky, o Perón y Evita; si lo desea.

Occam dijo...

Goolian: Todo bien. Asunto olvidado, al menos para mí. Como le dije, estoy tratando de tender un puente de concordia. Lo que pasa es que, debo confesarlo, la cuestión ésta de poner tanto el relieve en una cosa, casi obsesivamente, me terminó fastidiando un poco. Yo sólo me limité a pegar un artículo de un pensador argentino al que respeto mucho, y con el cual coincidí en su enfoque.
No voy a hablar de leones hervíboros, pero convengamos que en el berenjenal de odios irreconciliables que era la España de ese entonces, en la cual la vida no valía media peseta, José Antonio fue un hombre siempre reticente a la violencia y propenso a buscar el diálogo y el entendimiento entre los españoles.
El mundo estaba hecho un hervidero, y no había partido de masas que no pugnara por una salida violenta a las confrontaciones de ideas, ni en España, ni en casi ninguna parte. Y toda la praxis política se hacía por lo menos a golpes de puños. Las convicciones estaban emparentadas con el valor físico y la disposición al combate, como en la época de los primeros cristianos se medían a través de la disposición al martirio.
Pero no hay que olvidar las últimas palabras del citado cuando se dispuso su fusilamiento en juicio sumarísimo: "Que sea la mía la última sangre española vertida en discordias civiles". No son justamente palabras de un belicista. O por lo menos, no de un belicista interno. El nacionalismo muchas veces es expansionista y militarista, pero rehúye la guerra civil porque debilita y destruye los conceptos que él defiende: la patria, el pueblo, la fortaleza de la nación. Por el contrario, el comunista (internacionalista, como lo dice su himno) descree de la nación, a la que considera una artificialidad burguesa, y propugna la lucha de clases, es decir, la guerra civil declarada y sostenida en cada ciudad, en cada barrio, en cada casa, para la liberación de los oprimidos. En tal sentido, divide al mundo no ya en fronteras nacionales sino en fronteras económicas al interior mismo de cada sociedad.
Ambas son doctrinas divisionistas que se enfrentan a ciertas visiones utópicas de la humanidad hermanada sin límites y sin discordias que propugnan ciertas corrientes del anarquismo, sobre todo en la actualidad, del anarcoliberalismo. La validez de cada posición será siempre un juicio de valor, es decir, una cuestión subjetiva (de ahí que Sorel fuera el más acertado al rescatar para la sociología el concepto del mito).
Pero lo cierto es que cada época debe ser medida por el entramado de valores que se imponían en esa época para llegar a su comprensión y no a su juzgamiento.
A menos que lo que uno intente es juzgarla, claro está. Si ésa es la cuestión, condeno firmemente la guerra civil española, las matanzas y sus nefastas consecuencias, y saludo en cambio su presente democrático, el cual me gustaría que, a la luz de tan funesta experiencia, bregara más por la concordia, el olvido, la conciliación y la armonía de cara al futuro y la coexistencia pacífica, en lugar de las censuras, persecuciones e iconoclastias "democráticas" ahora tan en boga. Será, como sostengo en el último post, que cuando se habla tanto de una cosa, es porque esa cosa se está muriendo...
Mis cordiales saludos.

PS: Muchas felicitaciones por su vocación musical. Confieso que lo envidio al respecto, y sigo su sorprendente erudición en la materia a través del blog. Muy interesante el octeto de violines, por cierto.

Incorrecto dijo...

Goolian, mal pudo haber José Antonio admirado la dictadura franquista cuando fué fusilado por el delito de opinión, tan común entre los defensores de la democracia como Ud., antes que la citada dictadura comenzara.
Saludos

Incorrecto dijo...

Occam, como siempre, muy bueno el blog, lo seguiremos visitando.

Goolian, en las democracias es mejor el anonimato. Quien no concuerda con lo establecido es considerado hereje, y no quiero que me quemen. Sus otro sus dichos me tienen sin cuidado obviamente, respeto a todos y no me interesa que lo hagan conmigo, es que estoy acostumbrado a la tolerancia democrática, vió?

Occam dijo...

Incorrecto:
Me veo en el deber de aclarar, a estas alturas, que jamás el pensamiento de J.A.P.d.R. fue antidemocrático en los fines, sino más bien todo lo contrario. Lo que él teorizaba era que la democracia solamente entendida por la "forma" (como dictadura de las mayorías numéricas, fácilmente cambiables y arriables como ganado; en realidad, partitocracia) conspiraba contra el contenido, hasta llegar a ser la contradicción de sí misma: el régimen de la democracia por la forma era entonces, para él, antidemocrático, porque olvidaba el contenido, o más aún, destruía el contenido, algo concurrente con lo que usted viene a decir acerca de la intolerancia de la forma liberal de ese régimen formalmente tolerante.
Ha dicho J.A.P.d.R.: "Pero si la democracia como forma ha fracasado, es, más que nada, porque no nos ha sabido proporcionar una vida verdaderamente democrática en su contenido. No caigamos en las exageraciones extremas, que traducen su odio por la superstición sufragista, en desprecio hacia todo lo democrático. La aspiración a una vida democrática, libre y apacible será siempre el punto de mira de la ciencia política, por encima de toda moda". (Madrid, 16 enero 1931, Conferencia: "La forma y el contenido de la democracia").
Para concluir con una propuesta de revisión, investigación e imaginación para hallar en conjunto una fórmula superadora; en cierta medida, en la línea de Winston Churchill, que también detectó las falencias del sistema, aunque, en su caso, con pesimista resignación. Así cierra entonces la mencionada conferencia con estas palabras:
"No prevalecerán los intentos de negar derechos individuales, ganados con siglos de sacrificio. Lo que ocurre es que la ciencia tendrá que buscar, mediante construcciones de "contenido", el resultado democrático que una "forma" no ha sabido depararle. Ya sabemos que no hay que ir por el camino equivocado; busquemos, pues, otro camino; pero no mediante improvisaciones (como las del año pasado en la Academia de Jurisprudencia), sino mediante el estudio perseverante, con diligencia y humildad, porque la verdad, como el pan, hemos de ganarla con el sudor de nuestra frente".

Mis cordiales saludos.

RELATO DEL PRESENTE dijo...

En un país en el que todavía nos debatimos entre Rosistas y Antirosistas, es lógico que un pelotudo de 29 años, cuyo único merito para ocupar el cargo que ocupa es haber tenido la desgracia de nacer en la ESMA, se sienta con el derecho de opinar sobre historia que desconoce y que ni siquiera es de éste país.

goolian dijo...

Relato del presente si se refiere a mí; está totalmente equivocado.
Además su agresiva intervención me parece totalmente fuera de lugar.
La discusión ya había terminado, y ésto va también para Incorrecto; creo que de forma totalmente respetuosa.
Occam y yo encontramos un punto de diálogo, punto que ustedes parecieran volver a desequilibrar.

Occam dijo...

Goolian:
Relato del Presente se refiere a Juan Cabandié, actual líder de la JP por virtud de la dedocracia, que fue uno de los que impulsó la denuncia del camarista del aviso fúnebre por ante el Consejo de la Magistratura. El otro denunciante fue un abogado del Partido Comunista Argentino.
Mis cordiales saludos.

Incorrecto dijo...

Occam, ¿dónde lo dije? Ahora reviso.

Saludos

Occam dijo...

Estimado amigo del Relato:

Otra vez comunicándonos después de tanto tiempo, durante el cual usted no ha cejado ni un instante, y yo he tenido demasiadas claudicaciones al trabajo, al estrés y a algunos imperativos de la salud también.

En fin, cabe recordarle al señor Secretario General de la Juventud Peronista aquello que cita Vicente Massot en Las ideas de esos hombres (Sudamericana, Bs. As., 2007, p. 260), no sin previamente aclarar: "La regla de oro, pues, para calibrar la índole de sus ideas (de las ideas de Perón) requiere, a modo de condición necesaria, entender la naturaleza movimientista del peronismo, refractaria a todo encasillamiento ideológico y ajena, por completo, a la tentación de abrazar alguna de las grandes religiones laicas del siglo XX".

Cabandié eso lo desconoce, y como Secretario General de la Juventud Peronista, antes él estaría en estos momentos en riesgo de perder su puesto, salvo que, como los guerrilleros que conformaron el entrismo en los '70, entienda que es él el que le tiene que enseñar a Perón qué es el peronismo. En fin, voy al grano:

Sigue Massot, a continuación, en la misma página, ejemplificando acerca del aserto antes transcripto:

"Mientras a (Rafael García Serrano), seguidor de José Antonio Primo de Rivera, le confiesa: 'El justicialismo y el falangismo son la misma cosa separadas sólo por el espacio (...) me halagan sus palabras de falangista que, para nosotros, suenan a camaradería'"...

[Carta de Perón a R.García Serrano de diciembre de 1963, publicada por el Círculo Cultural Hispánico, Madrid, julio de 1987]

Un abrazo, y gracias por pasar.

Occam dijo...

Incorrecto: Es verdad. Usted no lo dijo, pero pudo entenderse que la defensa de su figura podría implicar una crítica per se a la democracia como alta idea inspiradora de todo ordenamiento político deseable. Es por ello que consideré propicio efectuar la cita de 1931. Para evitar las susceptibilidades, es siempre bueno aclarar qué tipo de democracia era la que el fundador de Falange cuestionaba. Una democracia revanchista, en el marco de la cual el gobierno imperante salió con sus matones a tomar venganza de los opositores políticos, a perseguir, a allanar, a encarcelar, a hacer espionaje ilegal. Ya he escuchado yo que a los opositores de Chávez, por ejemplo, también se los acusa de esa misma vocación antidemocrática, por no respetar el arbitrio de la mayoría.
Pero es bueno comprender integralmente el pensamiento de una persona, antes que achacarle tal o cual cosa, o convertirlo en sinónimo de todo lo detestable, o de todo lo alto, etc. En fin, es obedecer un poco a la reflexión de L.M. Bandieri en el artículo transcripto en este post.
En conclusión, sus palabras fueron el disparador de la reflexión, y no algo pasible de ser refutado, como creo que queda claro en el extracto de ese comentario mío: "algo concurrente con lo que usted viene a decir acerca de la intolerancia de la forma liberal de ese régimen formalmente tolerante".

Mis cordiales saludos

Occam dijo...

Incorrecto:
Y respecto de aquello que usted dice, acerca de que "en las democracias es mejor el anonimato" (en estas democracias, formalmente tan tolerantes y respetuosas del pensar discordante), creo que todos nosotros, que nos manejamos con seudónimos, que ocultamos cualquier seña de nuestra identidad, somos un cabal ejemplo de esa tolerancia.