viernes, 7 de octubre de 2011

Lesa "Humanidad"

Una definición bien clara y concisa, sobre un término tan promiscuamente utilizado cuanto oscuro, nos da el Torrero en su reciente artículo en memoria de José Ignacio Rucci:

Sin profundizar ahora lo que bien puede ser materia de otro post específico, la categoría de "crímenes de lesa humanidad" es una creación de posguerra destinada a afirmar la noción de "guerra discriminatoria", donde un bando se pone bajo el pabellón de la "Humanidad" y destituye así al otro de su condición y categoría humana. La "Humanidad" -por lo menos mientras los alienígenos no tengan una presencia más concreta y belicosa- no puede ser sujeto de derecho, ni bien jurídico protegido frente a otros integrantes del género humano. Los crímenes y horrores cometidos cotidianamente por la humanidad, son de todos modos crímenes y horrores, ya se los considere -como suele decirse en las crónicas policiales de la televisión- "inhumanos", lo que en el fondo resulta tranquilizante para las almas bellas, o como "humanos", lo que seguramente es más verdadero, pero con franqueza más inquietante. Lo cierto es que, entre nosotros, "lesa humanidad" se ha convertido en un comodín judicial destinado a sambenito para imputar, procesar y condenar al bando del "terrorismo de Estado" y para exculpar de cualquier persecución retroactiva al bando subversivo. Nuestra Corte declaró la imprescriptibilidad para los primeros en la causa "Arancibia Clavel" y la prescriptibilidad de los segundos en la causa "Lariz Iriondo".


Agregaríamos que también se impone una necesaria definición del asunto ése del "terrorismo de Estado". ¿Se considera al efecto la intervención armada de un Estado extranjero a través de agentes de inteligencia y propaganda, financiamiento de tropas irregulares, provisión de armas, apoyo logístico, entrenamiento de facciones, bases operativas, banking, refugios, etc., como los casos de EE.UU. en Nicaragua en los '80; Laos, China y EE.UU. en Vietnam; Cuba en gran parte de Latinoamérica y África en los '60 y '70; la U.R.S.S. en África; Inglaterra en el mundo árabe en entreguerras? ¿Se consideran al efecto sólo las acciones directas contra el bando criminalizado, o también las indirectas, como generar zonas liberadas; propiciar liberaciones masivas de elementos peligrosos de las prisiones; instigar, apañar y encubrir delitos desde el control de autoridades; señalar los objetivos a través de la prensa adicta, para inducir el terror, aislar a los opositores, y en su caso eliminarlos, como pasara con Rucci o con Mugica, etc.?



El asesinato del cura tiene su origen precisamente en el del sindicalista que hemos recordado. Leemos en Juan B. Yofre (El Escarmiento, Sudamericana, 2010, pp. 374-6): "Pero el distanciamiento (y posterior ruptura) de la 'orga' con Perón marcó un punto de inflexión que lo llevó [al Padre Mugica] a entrevistarse con José López Rega. Tras la reunión, dijo al periodismo haber reconocido ante el ministro que él siempre había sido peronista, como había creído que lo eran los Montoneros, que no aceptaba el marxismo y actuaría siempre en bien de sus hermanos villeros.

"En su edición del 28 de marzo de 1974, la revista Militancia de Ortega Peña y Eduardo Luis Duhalde [actual Secretario de DD.HH. de la Nación, casualmente], lo condenaba a la 'cárcel del pueblo', en una sección cuyos protagonistas fueron asesinados o sufrieron atentados.

"Comenzarían allí las amenazas, comentadas por él mismo a parientes y amigos, atribuyéndolas a Montoneros. Los dichos habrían de concretarse el 11 de mayo al anochecer. Mugica salía de oficiar la misa vespertina en la parroquia San Francisco Solano, Zelada 4771, acompañado por tres amigos -Ricardo Capelli y una pareja-, cuando un joven se le aproximó y le disparó cinco balazos que lo hirieron de muerte. Un cómplice que aguardaba junto al coche en que huyeron le tiró en ráfaga para rematarlo, hiriendo a Capelli. Ambos fueron llevados al Hospital Salaberry, donde el tercermundista Jorge Vernazza alcanzó a darles la extremaunción antes de que Mugica muriera desangrado. Capelli fue trasladado al Hospital Rawson y pudo sobrevivir. El cura villero fue velado primero en el sitio en el que lo mataron y luego en su capilla, en cuyos alrededores fueron acumulándose desde costosas coronas hasta humildes ramilletes, suscitándose un problema con un arreglo floral enviado por Montoneros, al que los vecinos intentaron destruir, lo que derivó en una paliza al diputado Leonardo Bettanin y a Juan Carlos Añón (JP de las Regionales), golpeados al grito de '¡Traidores! ¡Asesinos!'

(...)

"El martes 14 de mayo, Jacobo Timerman firmó un artículo en la tapa de La Opinión, en el que relató su último encuentro con Mugica, el 7 de mayo. En uno de sus párrafos revelaba: 'Me dijo que recibía constantes amenazas de muerte, que estaba convencido que esas amenazas procedían de Montoneros y que no eran desconocidas para Roberto Quieto y Mario Firmenich'.

"En Volver a matar se publicaron los dichos de Rodolfo Galimberti acerca de que él había tomado parte en el asesinato de Mugica... Galimberti contó lo referido durante una reunión en el centro de refugiados SKN de Ámsterdam y en la casa de Cloti, una holandesa colaboradora de dicho centro, que tres días más tarde se fue a vivir a España. De los dichos del Loco hay cinco testigos en Buenos Aires, dos mujeres y tres hombres. Más no interesa revelar; lo que importa es escribir la historia... que no se puede volver atrás".


La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación auspicia el "Homenaje al Che" en la ex ESMA, el próximo sábado. Ignoramos las acciones de E. Guevara a favor de los Derechos Humanos, y antes bien, nos permitimos humildemente recordar acciones ciertamente cuestionables al respecto, tanto en su gestión a cargo de los presos políticos en Cuba como en su drástica aplicación de la "justicia revolucionaria". De todo ello también algo hemos hablado aquí.

Siguiendo con las precisiones -tan necesarias cuanto eludidas por los "intérpretes" malintencionados, dueños del poder de señalar y perseguir en el país-, conviene remitirnos también a la zoncera del genocidio, en la lúcida opinión del pensador de Izquierda Nacional Jorge Santiago Miranda Sanger, que hemos reseñado tiempo atrás.

7 comentarios:

Martin. dijo...

Como siempre, interesantísimo y muy bueno el articulo. Gracias!

carancho dijo...

Pero cómo..? No eran jóvenes idealistas (según el gobierno)..? Los montoneros no eran santos que estuvieron a punto de ser beatificados..?
Este artículo es, seguramente, una conspiración de la derecha, la corpo, Clarín, los sojeros, la opo, el Mossad, la CIA y la rana René.

Occam dijo...

Martín: Muchas gracias a usted, por pasar, leer y comentar.

Un cordial saludo.


Carancho: Si algo no hay ni hubo en la política argentina (y probablemente eso sea bueno, sobre todo, pensando en casos como Girolamo Savonarola, y recordando la sabia lección de Julien Freund, acerca de la separación entre política y moral) es beatitud.
Tampoco hay posibilidad de circunscribir los análisis a su etapa histórica específica, y en gran parte la culpa de ello lo tiene esta aplicación arbitraria, sesgada y antijurídica de la "lesa humanidad" y su atropello sobre todo el sistema garantístico de la Constitución Nacional, y hasta del derecho de gentes: Ne bis in ídem, irretroactividad de la ley penal, aplicación de la ley penal más benigna, principio de inocencia, debido proceso (sobre todo, en lo atinente a la prueba: aceptación como testigos de víctimas y/o querellantes, aceptación de dichos de terceros, que invariablemente están muertos, conexidades absurdas, cuasi chimenteriles, etc.)... Ni hablar de las cuestiones penológicas, de los beneficios que amparan por ej. a los Schoklender o a Barreda, en función de la edad, del estado de salud, etc., o las demás garantías constitucionales y convencionales internacionales: prohibición de fueros específicos, límite en el tiempo de incertidumbre procesal (o sea, en la cantidad de años en que se tiene a un tipo preso sin ser juzgado), etc. Ni hablar de las "bajadas de línea" del presidente de la Corte Suprema a los tribunales inferiores, cada vez que se le pone un micrófono y una cámara delante.
En fin, si se circunscribieran los análisis a la Historia (esa disciplina con exigencias de objetividad y método y con el fin de establecer la verdad) en lugar de a la Memoria (esa característica eminentemente subjetiva, vinculada con la emotividad y la relatividad del sujeto), nos encontraríamos con una particularidad epocal muy marcada: en un mundo desangelado y que ha visto morir a Dios, el nudo existencial se constituye en torno a "cambiar el mundo", al compromiso revolucionario (Sartre). Un revolucionario, naturalmente, no puede andarse con chiquitas, sobre todo cuando la revolución compele a la guerra civil, que siempre implica la absolutización del enemigo como factor de todo lo malo, y que debe ser suprimido necesariamente. Si a eso le agregamos que las anfetas eran de venta libre y amplia difusión, tenemos un cóctel en el que la muerte, el asesinato, se transforma en la "acción política" por excelencia. El caso de Rucci, explicado por los mismos muchachos de la "orga", es suficientemente ejemplar al respecto.
Hoy día, anclados como estamos por esa obstinación en detenernos y enredarnos en viejas querellas de viejas personas, la muerte sigue siendo para algunos la "acción política" por excelencia. (Si no, revísense las plataformas, los planes, los objetivos políticos post-caída del Muro de Berlín: CERO, nulidad absoluta de ideas y de proyectos). Los tiempos cambiaron, es claro, y ahora, en lugar de la muerte física (que es excepcional, aunque también está presente), prepondera la muerte civil.

Un cordial saludo.

S.G dijo...

Mi estimado Occam a estas altura Ud estará enterado que acá se pone en duda la existencia de Montoneros.
Y que toda opinión contraria al respecto es solo una fantasía de la derecha. Véalo por Ud mismo http://www.lacapital.com.ar/politica/La-derecha-intenta-reinstalar-que-hubo-una-guerra-de-dos-bandos-en-los-aos-70-20111007-0070.html
Un abrazo amigo

Occam dijo...

S.G.: Agradeciendo su comentario, aprovecho para recomendar también éste, que me cuesta encasillar en "la derecha", ciertamente, y sin embargo se queja de la parcialidad y sesgo lamentable de nuestra historia (¡y de nuestra "justicia"!) reciente.

Mi más cordial saludo.

@PaloMedrano dijo...

Apreciado Occam,

Para sumar un nuevo elemento de juicio sobre la muerte del Padre Mugica, acá le dejo un video de 49 segundos, en el que Antonio Cafiero recuerda lo que hoy no quiere recordarse:

Cafiero tiene la palabra

Abrazo grande,

Lic.

Occam dijo...

Medrano: Como recuerda el viejo Cafiero, en la época del homicidio la autoría de la Orga era una verdad demasiado evidente. Es interesante cómo se distorsiona la historia hasta en sus aspectos más extremos. Recuerdo que en algún momento la "M" y sus simpatizantes incluso llegaron a deslizar que el asesinato del Comisario Villar y su esposa con una bomba en el Tigre había sido obra de la Triple A. En fin, un clásico argentino. No sé por qué no es el tero, en lugar del hornero, el pájaro nacional (de hecho, con el déficit de viviendas y los negociados plazademayísticos, que el pájaro más esmerado en construir su nido sea nuestro representante, es por lo menos jocoso).

Gracias por el video,y un cordial saludo.